viernes, 27 de mayo de 2016

Nos visita la escritora mexicana Magda Bárcenas!!!

Nos visita la escritora mexicana Magda Bárcenas.
Los alumnos de 5 to y 6 to. grado, la entrevistaron, tomaron apuntes y luego participaron de un hermoso y productivo taller de escritura. Bienvenida a la 20!!!






martes, 24 de mayo de 2016

lunes, 23 de mayo de 2016

Semana de la Lectura


La Semana de la Lectura








PROYECTO ESCUELA


PROYECTO ESCUELA



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GENERANDO BUENOS VÍNCULOS…

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FUNDAMENTACIÓN

La escuela primaria abre sus puertas cotidianamente para recibir a las múltiples infancias que conviven en ella. Su tarea central es desarrollar un trabajo colectivo que permita a cada niño vivir una experiencia educativa de carácter colectivo integral y enriquecido, en el marco de un vínculo comunitario que se torna sustantivo y profundo. Para ello, los docentes piensan prioritariamente la enseñanza y se preocupan por el modo en que esta se despliega en cada oportunidad de encuentro con los alumnos y los padres. Revalorizando estas dimensiones nos obliga a repensar en el quehacer diario, sosteniendo la confianza en el saber y en el respeto por las individualidades y los vínculos que se generan entre sí.

Si gestionar se redujese sólo a operar, a disponer y a trabajar a partir de los recursos con que se cuenta, entonces no quedaría mucho margen para dar respuesta a todas las situaciones –sobre todo a aquellas que resultan inéditas– que se presentan a diario en las escuelas. Esto es posible sólo si se tiene como punto de partida la idea de la igualdad de las inteligencias y posibilidades de cada uno para relacionarse con los demás, ¿Qué significa presuponer que todas las inteligencias son iguales? En principio, entender que ninguna desigualdad es natural. No hay un “reparto de inteligencias”, donde algunos recibieron mucha, otros poca y otros carecen de ella.

Una decisión ética conlleva la necesidad de analizar lo que nos desborda, pero con otra mirada: la mirada esperanzada –lo que no significa ingenua– que busca causas profundas. Mirada que escapa a una solución de compromiso para que, en el fondo, nada cambie.


Dice Graciela Frigerio: En este sentido, se entiende la igualdad no como un punto de llegada, sino como una concepción de partida para pensar y hacer justicia.

La escuela en situación es la escuela donde “está” ese director, esos maestros, esos niños, esos padres, esos auxiliares… todos, de uno u otro modo, en esa escuela, no como meros espectadores, sino implicados en lo que en ella ocurre. Esta implicación es la que posibilita, también, disponer de distintas miradas que enriquecen “la lectura” de lo que allí sucede, para poder tomar decisiones éticas que ayuden a sostener los acuerdos para encontrar el sentido formativo de las eventuales sanciones reparadoras.

Como dice Sandra Nicastro: Revisitar la escuela, volver la mirada sobre ella, tendría que ver con encontrar atajos; así, en los caminos ya conocidos, de pronto puede aparecer el sendero poco transitado, que provoca curiosidad, sorpresa.

Se trata, de este modo, de buscar caminos posibles donde pueda anidar la intervención. Tampoco se trata de buscar “innovaciones” en una galera sin fondo. La potencialidad de cada escuela puede estar allí, latente, sin que a veces la veamos.


OBJETIVOS


  • Garantizar el derecho a una convivencia sana y pacífica, libre de violencia.

  • Orientar la educación hacia criterios que eviten la discriminación y fomenten el respeto.

  • Elaborar acuerdos de convivencia.

  • Establecer lineamientos para la selección de sanciones formativas.



MARCO TEÓRICO



"Si la finalidad de la educación es garantizar el acceso y la apropiación efectiva de los saberes culturales, es obligación del Estado generar las condiciones para que la educación se torne posible”.

Los conflictos son inherentes a la vida de las personas; por lo tanto, lo son también a la vida escolar. Desde esta perspectiva, la escuela debe asumir el conflicto y trabajar en su resolución a través de la palabra puesta en juego, del diálogo y de la participación.

El conflicto es una oportunidad para el crecimiento y el desarrollo de las personas involucradas, en lo que se refiere a dos dimensiones que se consideran fundamentales para la vida en sociedad: la revalorización propia y el reconocimiento del otro. La primera supone desarrollar  y fortalecer la capacidad para afrontar las dificultades comprometiéndose en la reflexión, la decisión y la acción como actos conscientes e intencionales. La segunda implica desarrollar y fortalecer la capacidad para sentir y expresar preocupación y consideración por los otros, especialmente por esos otros cuya situación es distinta de la propia. El rol de la persona adulta en esta situación es, como en otras ocasiones, fundamental no sólo en la generación de condiciones facilitadoras sino en la intervención estimulante.

Se hace imperioso brindar desde la Escuela las posibilidades y oportunidades a los niños, generando el reconocimiento de sus derechos y el ejercicio de la reflexión grupal e individual para lograr el compromiso de cumplir con las obligaciones inherentes a cada uno desde su rol, originando  redes que permitan repensar y modificar hábitos y conductas.

En este marco la Escuela se presenta como el emergente para todo reclamo, escucha atenta y asesoramiento, lo que presupone una pronta respuesta y una solución inmediata. Aunque muchas veces la falta de recursos impide que esta demanda se vea satisfecha, se puede observar que con la voluntad y el compromiso de los diversos actores sociales que integran la comunidad educativa se equilibra esta situación.

A través de diferentes actividades (dramáticas, lúdicas, expresivas, etc.) se posibilitan nuevas construcciones sociales, que de manera preventiva, se constituyen como actos pedagógicos en sí mismos, que a la vez favorecen una convivencia mas pacifica y armoniosa entre los niños. Diseñando estrategias para una convivencia democrática que respete el cuidado de todas las personas.
Esta construcción, por supuesto, será consecuencia de reflexiones docentes colectivas, ya que entendemos que una convivencia escolar que permite que todos se sientan parte de la escuela implica un compromiso individual por parte de cada uno de sus integrantes. Las dificultades para la convivencia escolar exigen respuestas tanto a los docentes como a las familias en su rol de adultos que acompañan la educación de niños. Estas dificultades se producen tanto por lo que acontece dentro de las escuelas, como por todo aquello que ocurre por fuera de ellas y que de algún modo, directo o indirecto, las implica y afecta. En ocasiones, las respuestas que se han venido dando a las diversas situaciones conflictivas que se presentan en las escuelas no tienen en cuenta los problemas sociales y culturales que hoy nos enfrentan a nuevos desafíos. Por ello, resulta fundamental revisar las prácticas pedagógicas y acompañar las trayectorias de los estudiantes para intervenir de una manera integral y humanizadora en la realidad escolar y comunitaria.

Estamos convencidos  que una mirada atenta de las personas adultas posibilita la intervención temprana y evita la escalada de los conflictos y su posible agravamiento. La negación del conflicto es tan perjudicial como su no resolución.

Es muy importante trabajar con los niños, a través de la reflexión sobre casos concretos y el debate de argumentos racionales en la construcción de una perspectiva ética sobre la violencia en todas sus formas.

Debe existir un correlato entre la ampliación y efectivización de derechos, con la educación para el ejercicio de esos derechos, poniendo énfasis en las responsabilidades y obligaciones que conllevan a profundizar  y fortalecer  el lazo entre las familias y la escuela para la educación de las nuevas generaciones.

Ninguna escuela es idéntica a la otra, pero todas tienen en común la responsabilidad de garantizar el cuidado integral de los niños y esto involucra también la interacción virtual que afecta de idéntica forma la subjetividad y los vínculos; y por lo tanto requiere de los mismos cuidados. La singularidad del espacio virtual es su proyección en tiempo y espacio, trasciende ampliamente las fronteras y perdura en el tiempo. Al decir de Sergio Balardini, su efecto se "presentifica" y "transterritorializa", es decir, una imagen subida a la red en el pasado puede ser recuperada en tiempo presente, y además atraviesa fronteras puesto que se puede acceder a esa imagen desde cualquier lugar del mundo.

En lo que se refiere a la cotidianidad de la escuela, los docentes podrán habilitar instancias de diálogo e intercambio con los estudiantes para conversar acerca de cómo manejarse en el espacio virtual con el fin de aprovechar aquello que las nuevas TIC ofrecen; pero cuidando también los vínculos.

Otro aspecto imprescindible de abordar es la discriminación por orientación sexual o identidad de género implica rescatar el significado profundo de convivir en una sociedad plural y poner en valor la diversidad. Esto contribuye a poder superar esa idea acerca de que debemos "tolerar" lo diferente, a valorar de manera positiva la multiplicidad de formas en las que las personas nos manifestamos, pensamos, actuamos y amamos. Es así como las asambleas de grado constituyen una estrategia importante para fomentar la participación, la crítica y la toma de decisiones grupales respetando todas las voces. Poner en marcha las asambleas requiere:

  • Espacio y tiempo regulado y periódico para ellas
  • Normas de funcionamiento: participación, límites y posibilidades
  • Importancia y validez de los acuerdos que en ella se tomen
  • Garantizar la libertad y la justicia.

Las cuestiones que plantea la convivencia diaria en el grupo-clase son un marco especialmente apropiado para que los alumnos aprendan un modelo de participación democrática potenciando el grado de autonomía y responsabilidad en la organización de la vida del aula y en la resolución de los conflictos que surjan en esa convivencia. Se trata de crear las condiciones para que los alumnos expresen sus ideas, propuestas, sugerencias, quejas, conflictos, etc., a través de la participación.